Trabajo pendiente

Menos ramalazos autoritarios y más sentido del humor, que se os ve el plumero.

La semana se va y los posibles temas se acumulan sin poder darles salida, que el día da para lo que da y de vez en cuando hay que recopilar temas olvidados. Vamos con ello:

El de la idiotez patria con el tema del dopaje. La cosa es tan simple que no merece demasiada atención. Imposible que los deportistas de élite den el espectáculo que les piden sin ayuda. Todos recurren a las ayudas de todo tipo, pues como decía Vicente Belda, cinco puertos de categoría especial no se suben con “spaghettis”. Lo de los tribunales y sanciones no deja de ser un cinismo adecuado para lavar las conciencias de aquellos que se lucran del sudor de los deportistas, esos que no podrían correr o saltar o lanzar lo que su negocio pide sin recibir la ayuda que ellos les niegan. Simple, ¿no? Pues no lo debe ser tanto, que los nuevos jerarcas del PP se han cubierto de ridículo al enviar cartas y protestas al gobierno francés pidiendo…¿la censura? Hay que joderse como se les nota el ramalazo. Wert: el silencio es bastante mejor que el ridículo.

Vaticano. Mientras Rubalcaba pedía revocar el concordato para revolucionar los ánimos de un congreso bipolar, la jerarquía vaticana daba alguna señal de vida al darse por enterada de que ha habido abusos sexuales y de que las víctimas han sido doblemente humilladas: primero, por sus abusadores y segundo, por la estructura que los amparó y que volvió su ira contra las víctimas y no contra los verdugos. ¿Reacción? Veremos, que las cosas de palacio, van despacio.

¿Reforma? Necesito ayuda: ¿la famosa reforma laboral no debería orientarse, de forma prioritaria, a fomentar la contratación en lugar de abrir la puerta de salida a ingentes masas de desempleados? Espero ansioso una explicación sobre el tema. Muchas gracias.

Despedida. Se va Pere Navarro, un gestor público que ha conseguido una buena gestión y salvar muchas vidas. Con las motos no estuvo demasiado brillante a la hora de evitar los peligros con los que nos amenazan vías y ciudades, pero en general, sobresaliente. Da gusto poder felicitar de vez en cuando.