Decía un entrenador del Real Madrid que sus jugadores “habían corrido como pollos sin cabeza, muy rápido, pero sin destino” y algo así me da la impresión que es lo que está pasando con nosotros. Si nos fijamos en España, el gobierno anda de cabeza con los “escraches” mientras la CEE nos advierte de que la colleja que nos viene será de órdago. Andalucía mete miedo a los bancos con nos e gaitas de un proyecto de ley que huele a despelote jurídico y populismo por todos lados mientras Cataluña quiere subir los impuestos para empezar a pagar su independencia.
Eso si nos atenemos a España, que lo de Europa requiere tomos enteros de pormenorizado análisis. En tiempos de crisis como esta cada uno anda buscando salvar su culo a costa de lo que sea mientras que el conjunto “se les importa una higa”, que eso les viene grande y no hay por dónde cogerlo.
Los que nos deben dirigir han perdido la cabeza en sus rebatiñas y miserias y ahora tratan de llevarnos tirando cada cual de cada lado con nosotros de rehenes inermes ante su desatino. Cuando lo normal sería que se encerraran a pensar la mejor manera de salvarnos todos y juntos, ellos, preclaros próceres de la corrupción, la dejadez, el compadreo y la traición, se buscan sus judías a nuestra costa buscando el voto fácil de los que creen que les protegen. Si no se han percatado ellos, podemos dejárselo claro: la intención de voto del PP baja sin que suba el PSOE o alguien recoja el descontento. Como venga un listo populista, vamos de ala.
No hay comentarios:
Publicar un comentario