Los mediadores-facilitadores después de cagarla en condiciones.
¡Y encima querrán cobrar!
En San Sebastián se ha hecho pública una declaración que es el resultado de muchas cosas que no se conocen y de bastantes estupideces fruto de las ganas de meterse en camisa de once varas. Los firmantes de la tal declaración de cinco puntos sólo dicen una cosa cierta y que no tiene discusión: que ETA decida de una vez terminar con el absurdo que supone su vigencia. (Lo del absurdo lo digo yo, no ellos).
El resto de los cuatro puntos me parece una exhibición de vanidad personal, "buenismo" institucional y, lo voy a decir sin paliativos, gilipolleces varias con una excepción que alcanza la ofensa: la calificación de toda esa oscura historia de terrorismo, barbarie y sangre como "lucha armada".
Como habrá quien pierda el tiempo analizando las comas de la proposición - que tampoco hacía falta tanta alforja para este mediocre viaje - yo me voy a centrar en la ofensa que supone que gente de tanto calado y experiencia siga pensando que lo de ETA es una lucha armada. Las palabras, a veces, hacen más daño que las bombas y me temo que esta es una de esas ocasiones.
ETA no ha desarrollado una lucha armada: ETA ha sumido en el terror a un pueblo entero -el español -a base de oprimir y atemorizar a los habitantes del País Vasco y del resto de España. ETA ha matado a casi mil personas y si alguna vez tuvo justificación o razón de ser, la perdió cuando decidió no seguir los pasos de aquellos dirigentes históricos que vieron, en la democracia y las urnas, el único campo de batalla. Desde aquella histórica disolución, sólo quedó una organización de asesinos sin ninguna remota conexión con nada que tuviera que ver con la justicia. Y ojo, que soy generoso -quizá demasiado -con medio aceptar el debate sobre la justificación de combatir violentamente a un gobierno surgido de la violencia.
La continuidad de ETA en nuestra vida es una ofensa al buen gusto, a la lógica y a cualquier principio de vida social medianamente organizada. Nada hay que pueda argumentarse en su favor salvo el deseo de establecer una dictadura "abertzale" en el País Vasco, fin último de toda esta juerga.
Sobre otras cuestiones planteadas como ese "respeto a las consultas populares" yo les aconsejaría que pusieran condiciones: Cuando haga cincuenta años que en cualquier pueblo y rincón del país vasco se pueda comprar la prensa que se quiera, se pueda hablar de lo que se quiera y haga cincuenta años que la gente cuenta chistes de etarras en las tabernas de Mondragón, veremos, pero solo veremos.
Señores: en el país vasco NO HAY LIBERTAD PORQUE ETA MATA A LOS QUE NO SON DE ETA. La cosa es sencilla, ¿no? Pues a ver si se lo meten en la cabeza y dejan de marear la perdiz, que la democracia española ha sabido llevar las cosas hasta aquí y sabrá hacer lo que tenga que hacer sin que venga nadie a tocar los cojones con denominaciones de origen. Como diría Labordeta "Hala a cascala, joder"
P.D.- Todo ello si El País ha transcrito bien esta noticia: " Ahern ha explicado que los expertos internacionales han acudido a San Sebastián convencidos de que "ha llegado la posibilidad de finalizar la última confrontación armada en Europa".
Por otra parte, el calentón es de los gordos y me acojo al derecho de unaposible matización o rectificación si la calma me permite ver otras cosas, pero es que ....
No hay comentarios:
Publicar un comentario