DETENTE BALA. Suena tan antiguo....
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Aunque parezca mentira en estos días de principios del Siglo XXI, todavía podemos encontrar perlas que nos recuerdan los más rancios principios de la superstición medievalista: “..además de sus armas y pertrechos, uno de los objetos con los que partió hace semanas camino de Afganistán este caballero legionario (como otros miembros de la VIII Bandera del Tercio Don Juan de Austria, III de la Legión, que así lo desearon) fue un Detente Bala que les obsequiaron, a quienes quisiesen llevarlo, la Hermandad del Cristo del Perdón de Elche y sus paisanos del Círculo de Amigos de las Fuerzas Armadas de Jaén”.
La historia contada en http://www.religionenlibertad.com/articulo.asp?idarticulo=21353 habla de un legionario herido de gravedad que debería haber muerto en diez minutos en lugar de estar vivito y coleando en el hospital Gómez Hulla de Madrid. ¿La causa? El legionario llevaba el infalible “DETENTE BALA, el Corazón de Jesús está conmigo”.
Que a estas alturas alguien pueda pensar que un trozo de tela bordada pueda tener influencia en la trayectoria de una bala es algo que me llena de absoluto asombro, estupefacción y rechazo. Vamos, que subleva las neuronas por lo que eso implica, lo que conlleva y lo que algunos nos quieren meter como normal en nuestras vidas.
Alguien, mejor muchos de nosotros, deberíamos ponernos un poco más las pilas y hacer que estas cosas no se vean como normales; me repugna que pasen en silencio, que se pueda bombardear la realidad con estas idioteces sin sentido y que el mensaje quede como si pudiera ser considerado como algo válido y sensato.
En fin, es lo que pasa por dejar que los absurdos formen parte de la vida de los pueblos. Libertad para todo, incluida la superstición.
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