Estupidez

Mejor demostración de la sentencia de Albert Einstein, imposible:
Hay dos cosas infinitas: el Universo y la estupidez humana. Y del Universo no estoy seguro.

Para dejar las cosas clara, recurro (y me estoy aficionando por lo útil, cómodo y eficaz) al Diccionario de la Real academia y copio “1. f. Torpeza notable en comprender las cosas.2. f. Dicho o hecho propio de un estúpido.”. Definidos términos, matices y acepciones, paso a encuadrar al sujeto que anima el comentario, alguien absolutamente desconocido para mí y que me encuentro citado en otro medio de internet que no es El Mundo, diario en el que el tal elemento perpetra sus majaderías de manera habitual.

Como hoy nos centramos en comentarios y hechos, volvemos al socorrido copiar y pegar para alumbrar al lector con la sabiduría del eminente comentarista deportivo: (sic) “De todas formas nunca me gustó Casillas. Es increíble que diez años después de repetir los babosos que es el mejor portero del mundo, todavía siga sin saber salir, ni darle al balón. Hasta Adán sabe jugar con los pies”.

Para comparar lo que este estúpido comenta con los hechos, busco el palmarés de ese portero que no es del gusto del Sr Ruiz. La verdad es que quería copiarlo aquí y es tan enorme, tan amplio y tan increíble, que opto por copiar el link y que el lector lo consulte cuando y como quiera: http://es.wikipedia.org/wiki/Iker_Casillas , pero no me resisto a copiar los premios individuales del niño: 1 Trofeo Bravo (2000), 2 Trofeos al Mejor Portero del Mundo (IFFHS) 2008 y 2009, 1 Trofeo Zamora temporada 2007-08, 2 Mejor portero de los equipos que actúan en Europa 2007/2008 y 1 Trofeo al mejor portero del año para la FIFA 2009. Vamos, cosas que cualquiera puede ganar sin despeinarse.

Después de haber ganado todo, de tener el reconocimiento universal de todos y cada uno de los que saben de eso del Fútbol, no como yo, que no tengo ni idea; un deportista del nivel de Iker Casillas debe morderse la lengua y no llamar estúpido, imbécil y cretino a alguien que, sin haber tenido nada que ver con algo serio en el deporte, se permite el lujo de decir lo que este cretino dice.

Eso, que no debería pasar de ser la anécdota que justifica la eliminación del autor de la lista de colaboradores de El Mundo, se ha convertido en la maldición de la prensa deportiva de este país, verdadera jauría de ineptos que, sin saber, sin haber practicado el deporte y sin participar de las dinámicas y reglas de los equipos, se permiten el lujo de mentir por la cara, de inventarse noticias y problemas, de descalificar sin comprender y, por último, de llenar de mierda la ejemplar carrera de un deportista modélico que, además de parar como los ángeles, llena su vida y su tiempo libre de acciones solidarias y más ejemplares todavía que las exhibidas en el campo desde hace un par de lustros.

Esta especie de Lauren Postigo reconvertido a forofo, que también tiene un blog en el que se habla de fútbol y del Sevilla, se merece que no le dejen escribir más, sea sobre el tema que sea –parece que lo suyo es la música – y que su recuerdo se borre de la memoria colectiva que se va forjando en internet gracias a Google.

Si esto fuera un país serio, la gente no podría emitir ese tipo de juicios desde un medio de comunicación que se preciara de serlo, a pesar de que el Tribunal Supremo haya consagrado, en una sentencia, igualmente estúpida, el verdadero papel de la prensa rosa: mentir como bellacos sin temor al castigo. Si señor, con dos...tribunales.