Una más para los jueces

Abertzales en su encrucijada: urnas o pistolas.

Los jueces dirán.

Hoy se ha presentado un nuevo partido en el País Vasco. Una nueva marca electoral o el verdadero nacimiento de un proyecto político ajeno a las pistolas, nadie lo sabe. Y como nadie lo sabe a ciencia cierta, aunque muchos intuyamos que es una más de la de siempre, me imagino que el proceso normal será mandar la patata caliente a los tribunales. A los tribunales Pedro J, que en un estado de derecho no es el Gobierno el que decide sobre la interpretación de las cuestiones legales. Hoy, una vez más, El Mundo hace de El Mundo y titula “Debate: ¿Cree que el Gobierno le dejará presentarse el 22-M?”

El titular es manipulador, capcioso, dañino y completamente malintencionado. El Gobierno, como mucho, lo único que puede hacer para torpedear el alta en el registro es largarle el expediente a la fiscalía y preguntar sobre lo que debe hacer con el partido de marras. El gobierno no pude actuar con arbitrariedad o ajeno a los derechos de los ciudadanos, que eso si que es comportarse como una república bananera o como la versión más desahogada de Chaves.

La formación que hoy se ha presentado debe demostrar mucho, posiblemente debe esperar un tiempo de cuarentena; debe olvidarse de halar de “cualquier violencia” y mirar sólo hacia un lado: el de ETA. Y lo que me temo es que la fiscalía, mientras exista una ETA que no se desmantela y cierra la puerta.

El país vasco – de la mano de España -se encamina a un vía crucis largo y extremadamente complicado con muchas estaciones en las que se pondrá a prueba el temple de su sociedad. Esta puede ser la primera y ya empieza a tensar el tejido de los partidos, de los medios, locales y nacionales, y de todos cuantos tienen voz, voto, parte y arte (Virtud, disposición y habilidad para hacer algo, según el RAE) de manera que veremos lo que somos capaces de hacer entre todos.

Y deberemos, como primera medida, dar por bueno lo que digan los jueces, que para bien o para mal, son los que nos dan la pauta a seguir en estos casos. Y por favor: dejemos de cuestionar la validez de su criterio con todas aquellas decisiones que no nos gusten y aplaudir y dar bendiciones al sistema cuando las decisiones cuadran con nuestros deseos.

Que no nos pase nada y que no se pierda la calma, que esto acaba de empezar y ni siquiera estamos cerca de las tortas de verdad.