La asamblea de la WWF, institución de la que no me acabo de fiar en exceso, ha retirado al rey de España su condición de presidente de honor por el escándalo del famoso elefante, pero eso no significa que esa asociación gane prestigio, que más bien se coloca en el espacio dstinado al oportunismo fación.
¿Razones? Muchas, pero la principal es que la afición venartoria del Rey es sobradamente conocida de hace años, que hace años que se apunta a cualquier stejo en el que se garantice que hay abundante caza de cualquier clase.
El Rey de España y muchos de los patronos de la WWF son conocidos cazadores y la causa del rechazo de hoy incluso puede ser rebatida, pues el hecho se sitúa dentro de un programa económico bastante bien gestionado que permite preservar sistemas enteros, crear riqueza y enseñar un modelo que cambia algunas muertes por la pervivencia de las especies.
Considero mucho más dañina la caza que se ace hoy en España a base de fincas cercadas, exterminio de especies competidoras de las deseadas y poblaciones degeneradas por la endogamia más feroz.
No, la cosa debe ser más ética, más transparente y mucho más práctica y la aspiración debe ser conseguir que el hombre sea una más de las especies que participan de un ecosistema saludable, incluidas las muertes que nadie desea.
Si alguien quiere darse una vuelta y saber quienes forman la junta de la wwf y comprobar lo que digo y el tufillo general, que pinche http://wwf.panda.org/who_we_are/organization/presidents/
Por qué leer a Gustavo Bueno en su centenario
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Gustavo Bueno. Fotografía: Moeh Atitar
*© Fernando G. Toledo*
ste 1 de septiembre de 2024 no fue una fecha cualquiera para todo aquel
interesado en las...
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